Era una fria tarde de invierno, el calor del estomago se evaporaba en el ambiente, y los poros se encogian de frio no dejando salir ninguna gota de esperanza.
Hacia frio, mucho frio, las nubes se reunian para dibujar caras en el cielo azul, un cielo cadente de sol, pues hasta el tiene frio y esta tan bago k no quiere salir.
El halado viento corta su cara, mientras inmobil esperaba la fuente de calor, como era normal el llegaba 10 minutos antes de la hora prevista, para esperarla.
Se perdia entre su sueños y soñana entrar un dia a la boca del infierno para serntir calor, esa boca se acercaba por lo lejos de la calle y el viento empezo a calmarse, pues se sento en un rincon para contemplar el encuentro entre estas dos personas.
Ella se acercaba lentamente con paso firme, con una bufanda que le tapada la boca y el cuello, y en su mirada se notaba que estaba cansada y muerta de frio, pero al mismo tiempo se veia una chispa de fuego al verle, el se levanto y dio unos pasos hacia delante, empezo a frotarse las manos con sus guantes para generar calor y asi no darle la sensacion tactil de estar muerto, ella se quito la bufanda levemente para dejar mostrar su boca con aquellas islas perdidas en su mejilla:
-Hola, pequeña saltamontes - Dijo el con una sonrisa en la boca.
-Hola, gran bicho - respondio ella mientras pensaba en una frase - No hace falta que seas tan puntual e, que he visto por la ventana que estas aqui desde hace un buen rato. - Sonrio ella y se besaron labio con mejilla, mientras la cara de ella se mobia para cambiar la destinacion del beso, el sentia unas ganas infinitas de en ese transcurso robarle un beso de labio con labio, pero como siempre nunca lo hacia pues temia su reaccion.
-No me importa estar un rato esperandote. - Y paso su mano derecha por la mejilla de ella.
-Anda ¡¡¡ - Reacciono al tacto - Esta calentito.
-Ya, he estado frotando los guantes para que estubieran calientes.
-Yo estoy helada dios, me encantaria tener una estufa portatil.
-Si quieres te puedo abrazar para que tengas un poco mas de calor - Dijo el un poco sonrojado, y ella lo miro con unos ojos sonrientes, pero aun asi respondio.
-Parece que no te casas - Y sonrio con una risa de oreja a oreja.
-Jeje - Rio el - y parece que tu no me conozcas. Pero puedo o no ??? - El lanzo la pregunta al aire y ella dudo mucho sobre que decir, una parte de ella le decia que ni en broma, "dura hasta el final", y otra parte le decia "Dios dile que si, que el pobre lleba tiempo enamorado de ti dale un poco de alegria, es un estupido y la caga mucho pero es por que te quiere en locura y se pone muy nervioso", asi acabo su conversa mental con Daimon y dijo segura.
-No da igual tampoco tengo tanto frio - y le dio un golpecito en la frente y se dijo asi misma "sino la hubieras cagado tanto en el pasado ahora seriamos algo mas que amigos y si sigues currandotelo asi en poco tiempo te regalare un beso" - Venga vamos que tengo hambre.
-Viste ayer el ultimo capitulo ? - Pregunto el.
-Chi - Sonrio ella - Esta muy bien ahora biene lo interesante - y suspiro ella.
-Ya lo malo es k hay que esperar cada semana.
-Lo bueno se hace esperar, no crees ? - Le miro ella con una cara de pilla.
-Si, pero hay que saber hasta que punto hay que esperar - y el la miro con una cara de cordero degollado tremenda y le dijo - Tambien depende de que sea, no es lo mismo esperar por un capitulo de anime que por un beso tuyo.
-No desperdicias ni una para sacar ese "tema", no te has parado ha pensar que si dejas de hablar sobre el "tema" y empiezas a actuar sobre ello seria mejor - y le cerro un ojo.
-Mira que eres dificil.
-Si, lo soy, me encanta que si alguien dice que le gusto que me lo demuestre.
-Y a mi me encanta que seas asi. - y la abrazo sin avisar.
-Sabes que me encata de ti ?
-No, ni idea, el que ?
-Que me encata como me lo demuestras.
-Pero si a ti no te gustan las cosas que escribo ?
-Bueno eso es lo que digo, otra cosa es lo que pienso. - Y sin prebio aviso le regalo un pico en los labios. - Bueno adios.
-Ei espera, no te puedes subir a casa despues de esto. - Y ella cerro la puerto de la entrada de su casa. El se quedo solo en el portal, pensando, disfrutando aquella sensacion. Que el tanto tiempo anhelaba de ella, era solo un simle pico pero para el era el prncipio del paraiso.
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