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A veces... las cosas mas simples, tontas, cuotidianas de la vida... son las cosas que mas feliz nos pueden llegar a hacer, aunque no nos percatemos.

Coger el movil para mirar la hora como en cualquier instante de la vida, y por arte de magia "tiene una notificacion de tuenti" entrar y ver que es un mensaje en el tablon, entrar con curiosidad y encontrarme con un "te quiero" es simple, un detalle y nada mas... pero es algo que llena el corazón de felicidad, te hace sonreir como un estupido... y saber que alguien, piensa en ti, sitiendo ese gusanito por dentro. Eso no tiene precio.

Poco a poco, cambia los muros del laberinto. Dejando atras el miedo por volver a fallar, pintandolas con palabras de esperanza. Hay cosas que no se pueden expresar, simplemente se notan, se perciben...