Los retales de los sueños se desvanecen entre las sombras, la densa niebla nubla la vista en el horizonte, y las llamas se extinguen a su paso, dicen que son caricias... que son esperanzas que murieron al no poder abrazar su grácil torso.
El viento es mudo en sus ojos, hace tiempo que perdieron la vista, con los latidos del corazón guía sus pasos, con ángel desnudo en un pantano de dudas.
Enbarcandose, como naufrago en un mar de esperanza vacía, busca pescar en ese estanque. Como alma que perdió su cordura.
Hace tiempo que nada perdido, buscando la orilla que no ven sus ojos, que no siente su corazón y que sus manos son incapaces de alcanzar.
Dicen que solo las llamas de la pasión liberan este ser de su prisión... tu rostro en sudor, observa con ternura al pobre ser, perdido en sus propias penas. Y te acercas despacio... con sigilo, con dulces labios de la vida...
Yo soy ese ser perdido en el estanque... yo soy esa oscuridad...
Y tu...
Tu quieres ser el ser que me libere?
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